En muchos casos se confunde con la Enfermedad Celíaca. En esta nota te proponemos conocer la diferencia entre ambas patologías, qué síntomas presenta, cómo se llega al diagnóstico y qué tratamiento debe cumplir el paciente.
La sensibilidad al gluten no celíaca es una condición que nació hace muchos años, en 1978, cuando una paciente consultó varias veces a los profesionales por sus repetitivos síntomas compatibles con la enfermedad celíaca. Luego de hacer los estudios correspondientes, se descartó la celiaquía como diagnóstico.
Sin embargo, como la paciente continuó sufriendo afecciones fuertes, un médico estadounidense le recomendó que probara cumplir una dieta libre de gluten: sus síntomas desaparecieron. Luego de un tiempo, volvió a incorporar el gluten a su alimentación y los problemas volvieron a aparecer.
Esto evidenció que existen organismos que presentan una intolerancia a la proteína del gluten, sin ser necesariamente pacientes celíacos. Durante muchos años no se habló demasiado de la patología y en la última década se produce una relativa popularización de la condición.
Diferentes afecciones relacionadas al gluten
Por lo general, cuando se menciona la sensibilidad al gluten se la asocia con la enfermedad celíaca. Es fundamental explicar, sobre todo a los pacientes recién diagnosticados, que esto no significa que ellos sean celíacos sino que ambas enfermedades son entidades diferentes entre sí.
La diferencia entre la enfermedad celíaca y la sensibilidad al gluten es que esta última manifiesta su mejoría a través de los síntomas clínicos cuando se elimina el gluten / trigo, sin evidencia de daño intestinal.
En este punto debemos aclarar, que el término “sensibilidad” es el más correcto, ya que la intolerancia implica algunas diferencias.
Cuando hablamos de intolerancia a alguna proteína, es cuando hay un déficit de alguna enzima que no puede procesar los alimentos ; el ejemplo más conocido es el de la intolerancia a la lactosa, que se produce por la desaparición de las enzimas de lactasa.
Mientras que la sensibilidad, es una reacción inmunomediada que puede generar tanto síntomas intestinales como extra-intestinales. Además, no produce los mismos efectos en todas las personas; el cuadro clínico puede variar dependiendo de cada organismo.
Para llegar a su diagnóstico, es necesario descartar primero que no se trata de enfermedad celíaca o alergia al trigo. Es decir, se llega al diagnóstico mediante la exclusión de otras posibles patologías, ya que no existen biomarcadores o signos en el intestino para poder detectarla.
Las patologías que se deben descartar son tanto la enfermedad celíaca como la alergia mencionada. Cuando hablamos de alergia al trigo, se trata de una reacción alérgica como cualquier otra, que reacciona frente al consumo de alimentos que contienen trigo. Se produce una reacción cruzada entre el gluten y la inmunoglobulina “E” produciendo síntomas cutáneos, respiratorios y circulatorios. Para diagnosticarla se utilizan las pruebas cutáneas y dosaje de inmunoglobulina “E”. Se puede presentar con síntomas leves, moderados o hasta severos. Se diferencia de la celiaquía, ya que la reacción se produce como consecuencia del consumo de trigo y derivados, o por inhalación de harina de trigo.
La principal característica de la celiaquía es que para el diagnóstico se necesita sí o sí la serología y la histología. Además, esta enfermedad autoinmune se da en personas genéticamente predispuestas y puede derivar en la aparición de otras enfermedades autoinmunes, como la diabetes.
En muchos casos se confunden estas condiciones, por eso es importante acudir al médico y despejar todas las dudas con estudios específicos.
Sensibilidad al gluten
Si bien no existen datos certeros y en nuestro país aún no existen estadísticas epidemiológicas oficiales, se estima que por cada 1 paciente celíaco existirían 6 o 7 con sensibilidad al gluten.
Los profesionales coinciden en que no está del todo claro qué lo desarrolla, pero sí se sabe que el gluten / trigo es el encargado de disparar esta situación.
¡Ojo! No es el único componente patógeno. Se cree que los ATIs (Inhibidores amilasa-tripsina) y los FODMAPs (azúcares de cadena corta) también juegan un rol importante en el desarrollo de la respuesta inmunológica que da lugar a los posteriores síntomas.
La fermentación de los FODMAPs logra generar signos típicos como la distensión, la licuación de la materia fecal, etc. Se llega a esta conclusión luego de detectar que los pacientes que respetaban una dieta baja en FODMAPs mejoraron su situación clínica.
Síntomas
En cuanto a los síntomas, no varían mucho respecto a los de la enfermedad celíaca. Se pueden dividir en dos grupos: los intestinales y los extra-intestinales.
Relacionados al intestino, puede presentarse distensión, dolor abdominal, diarrea, alternancia de hábito evacuatorio y constipación. Aunque de manera menos frecuente, pueden darse también náuseas, aerofagia y estomatitis.
Respecto a los extra-intestinales, el más frecuente es el cansancio y también aparece fatiga, ansiedad, dolores articulares/musculares, cefalea, depresión y pérdida de peso o anemia.
Tratamiento
Respecto a la forma de tratarla, se recomienda llevar adelante una dieta libre de gluten por un tiempo para evaluar los resultados. Al no conocer la historia natural de la enfermedad, se aconseja reintroducir el gluten a la dieta 1 o 2 años después para observar los comportamientos del cuerpo del paciente.
Por este motivo es que no se puede todavía dar una respuesta sobre si se trata de una afección temporal o permanente. Es una pregunta que durante los próximos años la ciencia deberá responder.
Además, por la poca evidencia que existe hoy en día, se cree que no dispone complicaciones que deriven en otras enfermedades asociadas como sucede con la enfermedad celíaca.
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Ante la detección de cualquiera de los síntomas mencionados, se recomienda visitar al médico de confianza para encontrar el diagnóstico y tratamiento adecuado.
FUENTES:
– Video YouTube- “Sensibilidad al Gluten no Celíaca – Dr. Luis Schmunck” – Asociación Celíaca Argentina Oficial
– Video “Vivo – Día del Celíaco junto a Dra. Paz Temprano y Dr. Diego Sívori” – Instagram Snuks