Ninguna persona con esta condición debe dejar de lado su vida social. Si tenés hijos con celiaquía te acercamos tips y consejos que debés tener en cuenta para vivir y disfrutar de opciones increíbles.
Recibir el diagnóstico puede ser un shock, ya que no sólo hay que tener en cuenta nuevos cuidados en casa, sino también a la hora de salir. Lamentablemente, en muchos casos el paciente comienza a aislarse de a poco: evita ir a reuniones con amigos, cumpleaños o salidas por temor a transgredir la dieta o por vergüenza. Esto no tiene por qué ser así.
Un camino para emprender juntos
En la actualidad, gracias al crecimiento de la industria sin gluten, existe una variedad de alimentos que ayudan a normalizar situaciones que antes eran complicadas, por ejemplo, una picada con amigos. Hoy existen productos aptos celíacos que se combinan perfectamente con estas ocasiones.
La situación es un poco más compleja cuando la persona diagnosticada es tu hijo/a y es chico. Como padre debés llevar un control más exhaustivo de los alimentos que consume y educarlo con buenos hábitos alimentarios. Esto hará que el futuro sea más fácil.
Un aspecto positivo es que los niños comen lo que los mayores les dan, por lo que será más fácil evitar que ingieran alimentos prohibidos. Pero acá entra a jugar la vida social y lo que sucede cuando el niño cumple sus actividades fuera de la casa. ¿Cómo hacés para evitar que no coma gluten en la escuela? ¿lo dejo ir a los cumpleaños? ¿puede ir a practicar deportes al club?.
Estas son preguntas frecuentes que aparecen en los padres de hijos con celiaquía. Basados en la experiencia de Silvina Rumi, cocinera y mamá de 3 hijos con enfermedad celíaca, te contamos algunos consejos para enfrentar estas situaciones sin afectar el desarrollo personal y social del niño.
Cuidados al salir de casa
Fuera del hogar, los hijos con celiaquía, deben mantener los mismos cuidados que se tiene dentro de la familia. Sin embargo, está claro que las condiciones externas hacen más difícil cumplir con el objetivo de evitar la contaminación cruzada. Es más probable que alguna miga de pan con gluten caiga en la bandeja de la comida sin. A estas situaciones hay que prestar especial atención, porque la ingesta de al menos una miga tendrá consecuencias en la salud del paciente.
Si bien se debe estar alerta y no tan relajados, se aspira a que la enfermedad celíaca no se convierta en una enfermedad social, en que las personas se encierren, no van a la escuela, no van a dormir a la casa de un amigo, no se juntan. Por eso, los padres/madres ocupan un rol fundamental cuando se trata de niños, ya que serán los encargados de solucionar las situaciones de la vida cotidiana.
Salidas seguras
Un clásico evento de los niños son los cumpleaños. ¿Les prohibimos que vayan por temor? ¡Claro que no! Ese es un error que hay que evitar, no se le debe trasladar a los chicos el miedo de los grandes. Para estar tranquilos se debe recurrir siempre a la comunicación.
Silvina nos contó en el vivo que realizó para Snuks, que ella llamaba personalmente a los salones de fiestas para preguntar qué alimentos iban a servir en el cumpleaños. La respuesta era “chizitos, papas fritas, pizza, panchos”… Pero todos eran alimentos con gluten, los lugares por lo general no contaban con opciones sin TACC.
Para que sus hijos puedan asistir, ella llevaba las viandas con sus propias recetas, como pizzetas, snacks, pan de pancho, salchicha, todo envuelto en papel film para que no se contamine al momento de calentarlos en el microondas.
Siempre es recomendable explicar la situación a las personas que no conocen la celiaquía y sus consecuencias y no imponer de mala manera, ya que esto puede provocar el efecto contrario.
Por suerte la comunidad celíaca logró grandes avances y hoy, en argentina, la mayoría de los salones cuentan con alguna opción sin gluten. Pero la recomendación principal es hablar siempre con las personas encargadas de los lugares a los que asista tu hijo/a para organizar sus alimentos.
Otra situación habitual es que los inviten a comer a casas de amigos, en ese caso vos como madre/padre podés hablar con la otra mamá o papá y consultarle cuál es el menú que piensa realizar. Si alguno de los alimentos contiene gluten podés ofrecerle alguna alternativa para llevar. De esta forma te asegurás que el entorno comprenda la situación pero sin ocasionar un problema para la sociabilización.
Tips extras
- Siempre agregá en la mochila de tu hijo/a algún snack sin gluten para que pueda consumirlo en cualquier momento del día y evite la tentación de comer otra cosa.
- Cociná recetas sin TACC que puedas freezar. Te salvará en muchas oportunidades imprevistas.
- Acostumbrá a los chicos a comer vegetales y frutas, ya que son alimentos que naturalmente no contienen gluten.
Atender las necesidades
Comunicarse con los más pequeños también debe ser una tarea a desarrollar. Es importante estar atento a las necesidades que manifieste cada niño para buscar la alternativa que la satisfaga. Esto no se debe convertir en una frustración para ellos.
Silvina contó que sus hijos reclamaban que en los recreos de la escuela, sus compañeros tenían un paquete de galletitas para abrir y ellos no. Ante esta situación, comenzó a enviarles en la mochila las galletitas caseras sin gluten que preparaba pero en paquetes formados con papel celofán y una bandita elástica en la punta. De esa forma, los chicos asumían que tenían su propio paquete para abrir, al igual que los demás.
En conclusión...
Si tu hijo o hija tiene celiaquía, acompañalo/a en ese camino sin gluten sin dejar de hacer todo lo que aman. Además, podés comunicarte con la Asociación Celíaca Argentina para pedir ayuda.
Si aún tenés dudas, te recomendamos descargar nuestra Guía completa sobre celiaquía y conocer mucho más sobre esta enfermedad.